La evolución del deseo
Hace mucho tiempo que David Buss escribió sobre la conducta de emparejamiento ¿Me pregunto si su discurso sigue vigente?
La evolución del deseo
Hace mucho tiempo que David Buss escribió sobre la conducta de emparejamiento ¿Me pregunto si su discurso sigue vigente?
Su discurso sigue siendo vigente en gran parte debido a que, las personas en este ámbito tiende a no cambiar o recaer en los mismos errores y accione. Algo que menciona el capitulo es como una persona puede abandonar a su pareja simplemente porque no quiera mantener relaciones sexuales de forma activa y muchas personas tienen esa visión. También menciona algo muy importante y que ocurre mucho en la relaciones que son los celos, habla de ellos como algo convencional y tal vez algo normal, como en las relaciones las cuales muchas sufren o se perjudican por celos. En conclusión la forma en que este capitulo retrata los conflictos y deseos de los humanos, aunque haya sido escrito hace muchos años, sigue siendo muy realista en la actualidad.
Consideramos que el discurso de David Buss sobre la conducta del emparejamiento sigue vigente porque aún se evidencian patrones de estrategias a la hora de buscar pareja como los que el plantea. Más allá de un sentido emocional se busca salvaguardar las carencias de algo y cumplir un objetivo propio, por ejemplo: una estabilidad económica o física acorde a estándares de belleza. Sin embargo, las dinámicas culturales, las influencias sociales y el contexto cambian por lo que cambian las decisiones de emparejamiento. Pero, siempre bajo el mismo el principio de aumentar sus probabilidades de éxito y supervivencia genética.
Pienso que si, efectivamente sigue vigente debido a que la mayoría de sus argumentos se sustenta por parte de la biología, que es algo que no puede cambiar por más razonables que seamos los seres humanos.
Aunque sea un texto no tan reciente, considero que el mundo no ha cambiado mucho en cuanto los aspectos que el autor presenta, como lo puede ser la competitividad por conseguir una pareja, que es algo que sigue vigente en el mundo moderno.
En general pienso que aunque el ser humano ha llevado a cabo movimientos de igualdad de genero o de cambios de este mismo, la base de lo que viene siendo el emparejamiento sustentada por la teoría de Darwin sigue siendo relevante a día de hoy.
Sí, debido a que al día de hoy se siguen reflejando los ejemplos que este autor plasma en el texto, tanto en la sociedad humana como en los diferentes grupos animales. Se divisa el comportamiento que prevalece a la hora de querer conquistar un miembro del sexo opuesto; los métodos para intentar retener a la pareja y las constantes evoluciones para no quedarse atrás en cuanto a la competencia por una pareja.
En mi opinión, el discurso de David Buss en el primer capítulo de la evolucion del deseo sigue siendo relevante hoy en día porque como nos explica
Buss los seres humanos tenemos deseos y motivaciones profundamente enraizadas en nuestra biología, que nos influencian tanto en nuestras relaciones interpersonales como en nuestras decisiones de pareja. Estos deseos no solo están relacionados con la supervivencia, sino también con la reproducción y el bienestar emocional.
Además a pesar de los avances sociales y culturales muchos de los principios que Buss describe siguen siendo aplicables.
Quizás el enfoque de su discurso siga vigente en muchos aspectos, pero su “teoría”, es algo que se puede ir estudiando en constante evolución y dialogarlo en conjunto de otras teorías u enfoques similares a las de el, para que en su posibilidad, se puedan incluir más variables sociales y culturales, así como un entendimiento más profundo de la psicología humana en el contexto actual. Sin embargo, en su discurso, se reconoce que la biología tiene una gran influencia, pero las dinámicas culturales, la evolución de los roles de género, y las transformaciones sociales también deben ser consideradas más a fondo teniendo en cuenta el mundo actual desde que su obra fue publicada. Por ejemplo, que los hombres tienden a valorar la juventud y el atractivo físico, mientras que las mujeres valoran la seguridad económica y el estatus, eso quizá con el pasar de los años haya superado esa expectativa o tal vez devaluado.
Consideramos que es una opinión que sigue vigente hasta el día de hoy. A lo largo del texto se nos cuenta cómo nuestro deseo, afecto y sentimientos evolucionaron a lo largo de los años, e incluso, puede seguir comprobándose en la actualidad. El ser humano tiene una serie de estrategias y toma ciertas actitudes con la finalidad de asegurar descendencia, una de estas son los celos (que siguen siendo comunes en la sociedad).
En la actualidad hay diversos pensamientos y formas de ver las relaciones de pareja, teniendo en cuenta también las diferentes expresiones sobre sexualidad y genero que ya es un tema mas visibilizado por diferentes medios. Considerando esto el tema tratado por el autor y sus investigaciones son validas y pueden traerse a la practica de “emparejamiento” actual, pero quedaría corto en términos de diversidad, pues asi como el mismo autor plantea la idea de una evolución en las necesidades reproductivas y en las preferencias, generan mas cuestionamientos en cuanto a la búsqueda de una pareja se trata.
Los cambios en el mundo y en la sociedad hacen necesario una nueva alternativa de estudio para este tipo de temas. El hombre y la mujer actuales han creado nuevos criterios y nuevas preferencias mas amplias que permiten ampliar y detallar mas comportamientos humanos frente a las relaciones de pareja, adaptándose a nuevas necesidades estipulados por ellos mismos.
El texto sirve como un inicio ante lo que podemos conocer como esas estrategias fundamentales para el relacionamiento, pero en la actualidad es necesaria una profundización de la investigación por el constante cambio de una sociedad que avanza rápidamente.
La conducta de el emparejamiento, escrito por David Buss. Es un texto el cual considero que en la actualidad sigue aun vigente, ya que el nos explica las distintas razones por las cuales los humanos y animales buscan parejas, esto debido a su beneficio de genes y supervivencia.
Aunque en la actualidad, los jovenes no suelen mostrar interés de una relación formal, simplemente buscan algo pasajero; así que solo llegan a prestar atención a su apariencia física mas no llegan a prestar atención sobre las cualidades que debe tener su pareja para benéfico y supervivencia.
En cambio si llegas a una vida adulta, quizá yo no se le va a prestar tanta atención a la apariencia física sino a una persona con la cual puedas asegurar un futuro prospero. Es en este momento donde se analiza que es o quien me conviene mejor como pareja, puede ser una persona con una economía estable, trabajador, respetuoso etcétera. Esto con el objetivo de verse beneficiados para tener una vida prospera.
El autor plantea la evolución de las relaciones desde un punto de vista biológico, comparando el comportamiento humano con el animal, esta perspectiva nos permite especular sobre las relaciones humanas; pero no basta para explicar la complejidad de las mismas o llegar a una verdadera respuesta a preguntas sobre las relaciones humanas.
Buss habla de estadísticas, generalidades y comparaciones, argumentos que en la actualidad se ha demostrado ser estigmas y clichés desde un enfoque sesgado de los autores de su época.
Desde una perspectiva evolutiva, las relaciones románticas permiten analizar los comportamientos relacionados con el emparejamiento y las preferencias de pareja, que están influenciados por la evolución de nuestra especie históricamente.
Muchas de las ideas de Buss son relevantes en la actualidad. Su enfoque sobre como cada individuo selecciona una pareja basándose en factores como la atracción, la estabilidad financiera y el físico, son aspectos influyentes de la evolución. Cabe resaltar que, en el contexto social actual, la igualdad de género y las relaciones no monógamas han traído al mundo una nueva forma de emparejamiento, que ha estado influido por el desarrollo de las redes sociales. Por lo que, aunque las teorías de Buss sigan teniendo cabida en la actualidad, algunas de sus conclusiones pueden no aplicarse de la misma manera actualmente.
Aunque han pasado años desde la publicación de esta obra y aunque los cambios culturales han redefinido algunas dinámicas de pareja, los mecanismos que guiaron la selección de pareja en el pasado siguen manifestándose hoy en día.
Buss sostiene que hombres y mujeres han desarrollado estrategias de emparejamiento distintas debido a presiones evolutivas. Por ejemplo, mientras los hombres tienden a valorar la juventud y la fertilidad en una pareja, las mujeres suelen priorizar la estabilidad y los recursos. Incluso en aplicaciones de citas, donde la elección de pareja parece más libre que nunca, estas tendencias siguen posicionándose de forma sistemática.
Si bien factores como la independencia económica y los avances en equidad de género han permitido mayor flexibilidad en la elección de pareja, no se han eliminado las influencias biológicas que moldean nuestras preferencias y comportamientos. Por esto, la psicología explica no solo por qué nos sentimos atraídos por ciertas características, sino también fenómenos como los celos, la infidelidad y los conflictos en las relaciones.
El planteamiento de Buss sigue siendo relevante porque nos ayuda a comprender mejor nuestras decisiones afectivas y a reconocer cómo nuestra historia evolutiva sigue dando forma a nuestras relaciones en la actualidad.
Lo que plantea David Buss en su obra no es exactamente lo que la sociedad actual considera. El autor en su discurso tiene en cuenta estrategias e ideas, en su mayoría, ligadas a procesos biológicos; sin embargo, hay factores sociales que él no contempla. Por ejemplo, la estrategia de atracción utilizada por animales y humanos. La atracción física y el hecho de proveer a la pareja es algo que funciona, pero cierta parte de la sociedad, en primera instancia, no se fija en eso, sino que tienen en cuenta la personalidad. El autor no menciona este factor en su obra, y actualmente se diría que es importante en muchas relaciones. David Buss tiene razón en sus estrategias, pero llega a diferir de otras que en el presente son valoradas.
Creo que de alguna manera sí, debido a los aportes de su investigación, en la que evidenciaba cómo los comportamientos y gustos pueden ser determinados por lo biológico y evolutivo, como la posición económica de la pareja prima para ser elegida por otra.
En la actualidad, su discurso cambiaría de acuerdo a los factores y condiciones, a los avances en los roles y expectativas de género que atraviesan tanto a hombres como a mujeres, lo que afectaría a esos comportamientos y gustos a la hora del emparejamiento.
Se podría considerar que el discurso de David Buss sigue vigente. Apesar de que el texto de la conducta del emparejamiento ya tiene varios años de ser publicado, aún en estos tiempos se pueden ver patrones en el comportamiento de las personas como las describe David Buss. Al leer varios capitulos del texto, se pueden relacionar los datos de los estudios y compararlos con lo que podemos observar en nuestro entorno. Aunque dichos datos sufrieron cambios a medida que pasa el tiempo, aún se ven en gran medida dichos patrones reiterativos. Mucha gente, aún en estos tiempos donde se supone que ya debieron cambiar ciertas dinámicas, siguen estando de acuerdo con la forma en que David Buss describe las formas o gustos que los individuos tienen a la hora de elegir una pareja romántica. Lo que nos deja con una impresión de que la percepción de David Buss respecto a este tema, sigue vigente.
Creo que su discurso no se puede considerar completamente vigente, pues aunque el marco evolutivo en los estudios del ser humano sigue siendo útil, hoy en día hay estudios que justifican el porque basarse únicamente en lo biológico y evolutivo deja por fuera las diversidades sexuales y la fluidez de genero. Además, dejar los estudios socioculturales por fuera de dichos estudios y conclusiones no refleja una realidad imparcial.
Las cosas tienen movimiento, todo cambia, y el tiempo se encarga de poner cada cosa en su justo lugar, las ideas y los discursos son efectos de las condiciones físicas y materiales de la época, y estas mismas van teniendo transformaciones a través de la historia, así que en este caso deberíamos mirar qué parte del discurso aún podría tener cierta vigencia y nos podría ser útil para entender la sociedad pero, también identificar lo que ya no corresponde con las condiciones actuales, para así poder hacer una síntesis y generar nuevas ideas que nos impulsen para adelante como sociedad.
Considero que el discurso de Buss sigue vigente, puesto que en su definición de conducta de emparejamiento entran mecanismos biológicos que nos guían al éxito reproductivo y, muchos de estos, los vemos en comportamientos o preferencias que tienen los demás o incluso nosotros mismos.
Por ejemplo, al mencionar lo que las mujeres encuentran atractivo en una pareja porque históricamente les garantizaba una ventaja en el éxito reproductivo, hace referencia a cosas que puedo relacionar con mujeres en mi entorno que efectivamente han tenido tendencias a buscar estas características, como la estabilidad emocional y monetaria en una pareja a largo plazo.
Lo que hace que para mi siga siendo vigente es el hecho de que lo biológico no cambie de forma drástica en poco tiempo, así que aunque nuestra época no sea igual a la época en que fue escrito el libro, podemos decir que no nos hemos librado de lo que nuestros antepasados dejaron en nuestros genes.
En mi opinión el libro de David Buss aún tiene vigencia, porque son aspectos en los en los que los seres humanos nos fijamos para poder seguir sobrellevando la especie. Aunque este autor ignora los factores culturales los cuales también influyen a la hora de elegir una pareja.
Las opiniones en su libro la evolución del deseo pueden perpetuar estereotipos, ejemplo, cuando dice que las mujeres buscan hombres con un buen estatus, lo cual muestra que las mujeres están interesadas solo en lo material.
En mi opinión,el discurso de David Buss tiene algunos puntos que aún siguen vigentes, pero otros ya obsoletos. Por ejemplo: al mencionar lo que el considera que quieren las mujeres en una pareja, cae en estereotipos que se pueden justificar con la época que se escribió, pero al atraerlo al presente ya no es vigente decir que todas las mujeres buscan un hombre que las mantenga.
Por otra parte, un tema que sigue vigente son los hombres que buscan una pareja menor que ellos. Son un fenómeno cultural las relaciones de poder y la satanización de la vejez en la mujer, pero cuando un hombre envejece (con poder económico) se le aplaude poder costear sus mujeres “trofeo” o sus sugar babies.
El discurso de David Buss es vigente hoy en dia, debido a que las conductas y preferencias en la búsqueda de pareja siguen siendo muy similares a las actuales. Las mujeres tienden a preferir hombres estables en los habitos sociales y economicos, por el contrario, los hombres buscamos la juventud, fertilidad y valores de familia para la construcción de un hogar. David Buss busca darle una explicación a estas tendencias, en base a una evolución biológica y a investigaciones elaboradas por el mismo.
El discurso de Buss se mantiene relevante en el paso del tiempo para el estudio de las relaciones de emparejamiento. Pues, sus argumentos contradicen las investigaciones sociales mas recientes acerca de como las personas se emparejan y cuales son sus factores a tener en cuenta a la hora de buscar pareja. Siendo un golpe duro y franco de realidad para lo que se ha creído en los últimos años de como se crean los vínculos de emparejamiento. La idea del hombre que busca belleza, juventud en una mujer y la mujer que busca estabilidad social, económica y política, siguen marcando las tendencias en como los seres humanos nos emparejamos. Buss señala que las relaciones no han cambiando tanto como lo menciona las investigaciones sociales. Finalmente, pienso que los investigadores sociales y todo aquel que desee comprender de mejor manera a Buss tiene que entender que su idea acerca del emparejamiento esta limitada a como nos emparejamos. Él no pretende explicar algunos de los grandes temas de genero y sexualidad que tanto discutimos en la academia actualmente.
Me parece que varios de los aspectos mencionados en el discurso de David Buss siguen vigentes, ya que las personas siguen teniendo criterios específicos para elegir una pareja, ya sea la situación económica o el atractivo fisico. Aunque algunas conductas parezcan estereotípicas estas aún se presentan según el contexto y cultura de las parejas.
Sobre el escrito de Buss a cerca del emparejamiento, en definitiva, hay cosas que aún continúan vigentes y otras que, por su parte han ido desapareciendo. Un ejemplo de la vigencia del texto es que, en la actualidad, las mujeres (jóvenes y mayores) tienen preferencia por los hombres con mejor estabilidad económica, no obstante, pese a que es un factor importante hay otros elementos que ocupan un valor igual o superior a este, como el respeto, el buen trato, la lealtad, el amor, la sexualidad, etcétera.
De igual manera, es importante entender que pese a que el autor menciona la parte biológica como parte de su discurso, el contexto social y cultural de cada territorio marca una diferencia en las tendencias de escogencia de una pareja. En este sentido, no es conveniente generalizar. El autor afirma que en el caso de los hombres, estos se inclinan por la belleza y la superficialidad, misma idea que con el tiempo ha perdido valor, pues los varones al igual que las mujeres buscan un equilibrio entre otros ideales que suelen ser individuales y diferentes, mismos en los que influyen sus sentires y proyectos futuros. En conclusión, el autor tiene ideas que con el tiempo han perdido fuerza y otras que aún se mantienen.
La evolución del ser se basa en un ambiente incierto, el cuál le genera inquietudes que lo llevan a solucionar y ver desde otro ámbito la manera en que comprende el mundo que lo rodea. “La evolución del deseo” nos cuestiona si de verdad como especie estamos guiados por instintos animales o realmente la sociedad nos adapta para comportarnos de cierta manera.
Charles Darwin nos plantea desde la selección natural que todos los seres vivos existentes son aquellos que han sido los más dominantes y fuertes en todos los aspectos, por lo que han logrado pasar sus genes de una generación a otra.
David Buss publicó “La evolución del deseo” hace muchos años y, aunque el mundo cambió mucho desde ese momento, su análisis sobre la conducta de reproducción y emparejamiento se sigue evidenciando en la actualidad. Él se basa en la evolución, un proceso que se desarrolla a lo largo de miles de años; debido a esto, las estrategias y las preferencias de apareamiento o emparejamiento no cambian de la noche a la mañana.
En conclusión, ambos capítulos presentan una visión interesante sobre la naturaleza de la atracción humana y cómo esta ha evolucionado para ayudar a los humanos a seleccionar parejas adecuadas. Es importante tener en cuenta el hecho de que este texto es uno de los muchos pensamientos y teorías que pueden ayudar a entender la complejidad de la compaginación y la atracción humana en la actualidad.
Dentro de la complejidad de nuestra sociedad, con su gran diversidad y conductas variables, aún se conservan a pesar del paso del tiempo, ciertas cualidades descritas por el autor para determinar las preferencias femeninas por un compañero. Las posturas que describe Buss, en relación a la existencia de las mismas en la cotidianidad, siguen en vigencia con algunos matices distintos dependiendo del contexto en el que se aborde. No obstante, la focalización radicalmente biológica del autor difiere un poco del contexto actual. Hemos cambiado mucho como sociedad, nuestros deseos, especialmente los sexuales, aún están influenciados por nuestra evolución. Las normas sociales actuales cambian constantemente la forma en que nos comportamos, por el contrario, los orígenes biológicos siguen siendo clave en cómo nos relacionamos. La globalización, los avances tecnológicos y los diversos movimientos en pro de la igualdad, han modificado en cada individuo el concepto de una pareja adecuada. Se debe tomar en cuenta a las personas como seres con la capacidad de sentir, pensar y razonar de manera influenciada por contextos externos a la biología. Por tal motivo, este planteamiento nos induce a una respuesta variada a condiciones naturales de la vida humana, divagando entre motivaciones reales e influyentes en el accionar personal, entendido como aquella búsqueda constante de estabilidad, organización y bienestar. Lo que nos deja como resultado, una postura divergente a la analizada en aquel momento, creando juicios de valor y preceptos derivados a una concepción estructurada, enfatizando en la búsqueda constante de una condición de vida sólida.
Parte de lo que menciona David Buss en La evolución del deseo sigue vigente, pero los avances culturales y tecnológicos han transformado lo que hombres y mujeres buscan en una pareja. Por ejemplo, el papel de la mujer en la sociedad ha cambiado drásticamente, ya que ha desarrollado autonomía y una voz más fuerte, lo que le ha permitido alcanzar logros que antes eran inaccesibles. Como resultado, muchas mujeres hoy en día ya no tienen los mismos deseos que sus ancestras.
Factores como la estabilidad económica o los genes predominantes, que en su momento fueron claves en La selección natural según Darwin, han pasado a un segundo plano. En la actualidad, en la búsqueda de pareja prevalecen la fidelidad, el compromiso y la estabilidad emocional, aspectos que reflejan una evolución en las relaciones humanas. Aunque los principios biológicos siguen influyendo en la atracción y el emparejamiento, la sociedad moderna ha redefinido las prioridades, dando mayor importancia a la compatibilidad emocional y el bienestar mutuo.
Sí, este sigue vigente, pues sus observaciones sobre la evolución del deseo se reflejan en la sociedad actual. El nos explica cómo nuestra evolución influye en lo que buscamos en una pareja. Como estatus, belleza y la necesidad de seguridad (en donde tradicionalmente el hombre aporta firmeza y la mujer cuidado) se mantienen, pese a que hoy las mujeres se expresen de una forma diferente, habiendo logrado romper ciertos estigmas. Aun así, sigue existiendo la elección sobre con quién estar y que este le brinde esa seguridad deseada
Las ideas que presentó David Buss en La evolución del deseo siguen siendo muy relevantes, aunque nuestra forma de vivir y relacionarnos ha cambiado un montón. La cultura y la tecnología han transformado nuestras relaciones de pareja y lo que esperamos de ellas. Un claro ejemplo son las mujeres, que han logrado una independencia y un poder de decisión impresionantes, alcanzando metas que antes parecían imposibles. Esto ha modificado lo que buscan en una relación, al igual los hombres que actualmente a pesar de que buscan una relación sentimental el aspecto físico sexual sigue siendo un tema de mucha importancia para la relación de este.
Ya no se trata únicamente de estabilidad económica o de características genéticas, que durante mucho tiempo fueron lo más importante; ahora mucha gente valora aspectos más humanos y profundos. En el mundo actual, la autenticidad, el respeto y la conexión emocional son esenciales en nuestras relaciones. Esto prueba que lo que buscamos va más allá de lo biológico y se centra en la calidad de nuestros vínculos.
Aunque los principios biológicos en la atracción y las relaciones siguen ahí, nuestra forma de entender el amor ha cambiado. En vez de seguir patrones rígidos, buscamos relaciones significativas y duraderas que enfrenten juntos los retos del mundo actual. Este cambio representa una evolución hacia una mayor empatía, comprensión y crecimiento compartido.
Consideramos que el discurso que plantea el texto sigue vigente, la evolución ha tenido influencia en las estrategias de atracción y las interacciones entre las parejas. Si bien la sociedad ha cambiado mucho en cuanto a términos de cultura y parece que esas cuestiones evolucionistas se han dejado un poco de lado para dar más prioridad a la conexión emocional y la compatibilidad , es evidente que la forma en que los humanos elegimos nuestras parejas aún se ve fuertemente enlazado con nuestras necesidades primitivas para lograr sobrevivir, aunque hay excepciones, se nota un patrón común en el comportamiento humano, la mujer busca seguridad y estabilidad en su pareja, mientras que el hombre se guía más por factores físicos, qué aseguran una descendencia mejor.
Otro concepto que menciona el libro y que podemos ver repetidamente en la actualidad es como los celos surgen como un mecanismo primitivo para proteger o alejar a la pareja de otros individuos que puedan cortejarla
Sabemos además, que el libro plantea su tesis desde la teoría evoluciónista de Darwin, la cual es una teoría que hoy en día sigue siendo la más avalada y acertada, así que negar que este texto tiene relevancia en la actualidad sería negar la relevancia de la teoría mas importante de la biología.